Me pongo cachonda con un libro erótico y pido sexo a mi pareja
723Cuando necesito echar a volar mi imaginación, recurro a un libro erótico con el que muchas veces acabo cachonda. Después de un rato de lectura, empecé a sentir la necesidad de meterme mano y poco a poco fui desnudándome en la cama. Mi pareja me vio con ganas de sexo y tras pedirle que se acercase, los dos acabamos dándole al sexo como animales y probando todo tipo de posturas, hasta acabar satisfechos y pidiéndole que se corriese sobre mis melones.